En esta entrada voy a intentar reunir una serie de consideraciones y recomendaciones generales que espero encontréis útiles a la hora de preparar vuestro viaje a Israel y Jordania por libre. De todas formas, como siempre os digo, si tenéis cualquier duda o necesitáis información adicional, podéis utilizar el apartado de comentarios. Así que allá vamos…

Seguridad

Cuando comentamos a nuestro alrededor que nos íbamos de viaje a Israel, muchos conocidos nos dijeron que si estábamos locos ya que la concepción que ellos tenían de este país era de un polvorín a punto de estallar, que aparecía en las noticias día sí y día también por los bombardeos en Gaza y el conflicto palestino-israelí.

Lo cierto es que es una zona en conflicto, eso no lo vamos a negar, pero en el día a día allí no lo notamos, al contrario, creo que es uno de los países donde nos hemos sentido más seguros. En Jerusalén, principalmente, hay policía y militares controlando cada esquina, lo cual es posible que haya a quien le genere intranquilidad o incomodidad, en nuestro caso, todo lo contrario. Además, en alguna ocasión nos dirigimos a ellos para preguntarles alguna dirección o dónde coger algún autobús y fueron muy amables en sus indicaciones.

Muro que separa Israel de los territorios palestinos

También creo que es importante aplicar siempre en cualquier viaje el sentido común y no meterse en zonas desconocidas o peligrosas. Por supuesto, a la hora de recorrer Israel, la recomendación es no acercarse, en ningún caso, a la zona de la franja de Gaza.

Si alquiláis un coche para moveros desde Jerusalén hacia el norte de Israel, es inevitable pasar por Palestina, pero veréis que no hay ningún problema, las carreteras son seguras y de vez en cuando tendréis que pasar algún control de seguridad en el que suele bastar con enseñar el pasaporte. Tened en cuenta que hay ciudades como Jericó que son territorios exclusivos bajo la autoridad de Palestina a los que no se puede pasar con un coche de alquiler de una empresa israelí ya que el seguro no os cubre allí. En esos casos veréis amplios carteles avisándoos de que entráis en este territorio.

El tema de la seguridad se nota también mucho en la llegada y la salida del país en el aeropuerto, ya que hacen varias preguntas sobre el itinerario que vais a seguir, si conocéis a alguien en el país, el propósito del viaje, la relación entre vosotros, etc. En nuestro caso, tanto para entrar como para salir nos hicieron cuatro o cinco preguntas y no se demoró mucho el trámite. Como anécdota, os diremos que para salir del país nos preguntaron que cuánto tiempo hacía que éramos pareja y Sergio se inventó el número de años y por supuesto no coincidía ni con la realidad ni con el tiempo que dije yo, a la chica de seguridad le hizo bastante gracia la mirada asesina que le eché a Sergio…

En cualquier caso, mi recomendación a la hora de viajar a Israel es que dejéis los prejuicios en casa y viajéis con la mente abierta. Hablad con todos los locales que podáis, tanto de una zona como de otra, de la religión que sean, escuchad su versión de la historia y que cada uno saque sus propias conclusiones.

Documentación y visados

Para entrar en Israel, basta viajar con el pasaporte con una validez mínima de 6 meses después de la fecha prevista de regreso. En el aeropuerto os expedirán una tarjetita con vuestros datos y vuestra foto que debéis llevar junto con el pasaporte durante vuestra estancia en el país.

En el caso de Jordania, como os comentaba en la entrada principal del viaje, sí es necesario obtener un visado que os expiden directamente en el aeropuerto o en el control fronterizo por el que accedáis. Recordad que si dormís tres noches o más en territorio jordano, os podéis beneficiar del Jordan Pass.

Mi recomendación siempre es que echéis un vistazo a la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores de España para comprobar qué documentación es necesaria para entrar en cada momento a los distintos países, ya que, aunque no es habitual, a veces se producen cambios.

Cambio de moneda

En nuestro caso, como en la mayoría de viajes, intentamos pagar todo lo que sea posible con tarjeta, para lo que solemos utilizar la WiZink. Nos la hicimos hace bastantes años para ir a Nueva York porque leímos en distintos blogs que era la que mejor cambio hacía (toma el cambio oficial del día) y no cobra comisión ninguna. Actualmente no sé si habrá otras tarjetas mejores, pero nosotros con esta nos manejamos bien.

Para los casos en los que no queda más opción que pagar en efectivo, solemos sacar directamente de algún cajero haciendo uso de la tarjeta de EVO bank. Aunque en teoría no deberían cobrar comisiones, últimamente hemos notado que en distintos países sí que nos han cobrado por hacer uso de los cajeros, por lo que no estamos muy contentos con esta tarjeta y estamos estudiando otras posibilidades.

Por último, en el caso de Jordania, cambiamos euros por dinares jordanos directamente en la casa de cambio del control fronterizo, por supuesto con un tipo de cambio totalmente abusivo, pero necesitábamos los dinares para pagar el visado. En estos casos, mi recomendación es que cambiéis el dinero justo y necesario que vayáis a necesitar con urgencia.

Acceso a Internet

En Israel la mayoría de los alojamientos y locales de restauración disponen de red WiFi para poder conectaros a Internet (en unos casos más rápido que en otros). No obstante, nosotros nos compramos una tarjeta SIM con Internet móvil ya que consideramos muy útil contar con conexión, especialmente cuando necesitamos consultar cómo ir a un determinado sitio o buscar recomendaciones de un buen restaurante para comer o los horarios actualizados de algún museo a visitar. En nuestro caso, compramos la tarjeta SIM en una tiendecita de electrónica la ciudad antigua de Jerusalén, creo recordar que por la vía dolorosa.

Shabbat

El shabbat es el día sagrado para los judíos y, por tanto, su día de descanso. Abarca desde el atardecer del viernes hasta que entra la noche el sábado. Por tanto, en shabbat encontraréis gran cantidad de comercios cerrados, especialmente en las ciudades con mayor tradición judía como pueda ser Jerusalén. También os costará encontrar restaurantes abiertos en aquellas zonas más religiosas e, incluso, es posible que el ascensor de vuestro alojamiento no funcione ya que la tradición más estrictica señala que no se debe usar electricidad en shabbat.

Si estáis en Jerusalén un viernes por la tarde, no dudéis en acercaros a la plaza del Muro de las Lamentaciones ya que allí veréis reunirse a familias enteras de judíos para cantar y bailar en la plaza. Sin embargo, en sábado, sí que puede ser buena idea ir a zonas con menor tradición judía que tendrán mucha más vida. Nosotros, optamos por visitar los territorios palestinos uno de los dos sábados que estuvimos allí y visitar Haifa el segundo sábado.

La plaza del Muro de las Lamentaciones un viernes por la tarde

Guía de viaje

En esta ocasión, la guía de viaje que utilizamos para movernos en nuestro viaje fue la Lonely Planet, con información precisa tanto de Israel como de los territorios palestinos. Además, tenía un pequeño apartado dedicado a Jordania, que nos fue de utilidad para nuestra escapada de dos días allí.

Comiendo y la guía de viaje siempre a mano

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