Una de las cosas que más le apetecían a Sergio de nuestro viaje a Perú era la posibilidad de recorrer los 38 km del Camino Inca desde el Valle Sagrado hasta Machu Picchu. A mí (Teresa), en cambio, tampoco me emocionaba demasiado la idea de ascender y descender valles y montañas a más de 3.000 metros de altitud o tener que dormir en una tienda de campaña y no disponer de baño.

Sin embargo, me alegro infinitamente de haber hecho caso a la insistencia de Sergio, ya que cambié de opinión en cuanto puse el primer pie en el senero abierto por los incas y así pudimos disfrutar de una de las mejores experiencias de nuestro viaje a Perú.

Entrando al Camino Inca
Entrando al Camino Inca

Recorrer durante cuatro días los 38 km del Camino Inca es disfrutar de la naturaleza y de un montón de complejos de ruinas precolombinas alejados de las grandes muchedumbres que se pueden encontrar en otros lugares. Además, llegar a Machu Picchu desde Intipunku (Puerta del Sol), después del esfuerzo físico realizado los días previos, es impagable. Por otro lado, se suma que somos de los primeros en llegar. De esta forma disfrutamos de un rato prácticamente a solas en Machu Picchu antes de que lleguen el resto de visitantes.

Permisos de acceso al Camino Inca

Pero claro, esta experiencia “mística”, tiene una alta demanda y una oferta escasa de plazas. El Ministerio de Cultura de Perú se encarga de regular los permisos del camino inca y solo emiten 500 al día. Del total, además, hay que descontar los del personal que acompaña a los senderistas. Para que os hagáis una idea, en nuestro grupo éramos 13 senderistas e íbamos acompañados por dos guías, 20 porteadores, un cocinero y su pinche. Con estas cuentas, por cada persona que quiera hacer el Camino Inca se necesitan unos tres permisos.

Nuestro grupo durante el Camino Inca
Nuestro grupo durante el Camino Inca

Así que si estáis seguros de que durante vuestra estancia en Perú queréis hacer el Camino Inca, miradlo con suficiente antelación, ya que los permisos se agotan unos 5-6 meses antes. Si, como era nuestro caso, viajáis a Perú en agosto, la demanda es aún más alta, por lo que a lo mejor necesitáis mirarlo algo antes.

En nuestro caso, empezamos a mirarlo a principios de febrero, y ya no había pases disponibles para la semana de agosto en la que queríamos hacer el camino inca, así que movimos todas las vacaciones una semana para poder conseguir los pases y hacerlo.

Disfrutando de las ruinas incas que encontrábamos por el camino
Disfrutando de las ruinas incas que encontrábamos por el camino

En caso de que no podáis planificar el viaje con tanta antelación o cuando queráis mirar la posibilidad de realizar el Camino Inca, ya no quedaran permisos para las fechas que teníais en mente, una buena opción es realizar el Camino Salkantay, para el que no hay límite de permisos.

¿Con qué agencia hago el Camino Inca?

Volviendo al Camino Inca, si estáis pensando hacerlo por vuestra cuenta, sin agencias, guías, etc., nos tememos que es imposible. Solo se pueden adquirir los pases y realizar el Camino Inca a través de una agencia autorizada por el Gobierno de Perú.

Por fin en Machu Picchu
Por fin en Machu Picchu

En nuestro caso, tras leer diversas opiniones por distintos foros elegimos la agencia Alpaca Expeditions, ya que contaba con muy buena reputación tanto a la hora de gestionar toda la fase previa de reserva de permisos, como en comodidad y manutención durante la travesía y, lo que para nosotros era más importante, en cuanto a temas de seguridad tanto para los senderistas como para su personal. Otro tema importante es que es una de las agencias más respetuosas tanto con sus trabajadores como con el medio ambiente.

Sergio comprobando el peso que llevaban los porteadores
Sergio comprobando el peso que llevaban los porteadores

Ya tengo la agencia: ¿ahora qué?

Contactamos con ellos para gestionarlo todo y desde el principio nos atendieron rápida y eficientemente. Ellos mismos se encargan de gestionar el tema de los permisos, pero es necesario comprobar previamente que hay disponibilidad para las fechas deseadas y eso es labor de los interesados.

Nos ofrecieron muchísima información para prepararnos para el Camino Inca, previamente por correo electrónico y, antes de comenzar el Camino Inca en una sesión de “briefing” para acabar de cerrar los detalles.

Durante la tercera etapa, disfrutamos de ruinas tan fantásticas como estas
Durante la tercera etapa, disfrutamos de ruinas tan fantásticas como estas

En nuestra búsqueda vimos que hay agencias más baratas, aunque la diferencia no es grande, y creemos que merece mucho la pena ir con ellos. Desde luego, tras nuestra experiencia con Alpaca Expeditions, repetiríamos seguro.

¿Cuánto cuesta hacer el Camino Inca?

Y, hablando de dinero, hacer el Camino Inca no es barato, a nosotros nos costó 690 dólares por persona, a los que habría que sumar extras como el saco de dormir, colchoneta o bastones si así se requieren. Puede parecer mucho dinero y, ciertamente, lo es. Sin embargo, todo lo que rodea a Machu Picchu es carísimo: el tren hasta Aguascalientes, las entradas para acceder a Machu Picchu, los billetes de autobús desde Aguascalientes a Machu Picchu… Si además le sumamos los permisos de realizar el Camino Inca, 22 personas que acompañan al grupo durante cuatro días y contribuyen a proporcionar todo tipo de comodidades durante el viaje (incluyendo montar y desmontar los campamentos cada día y llevar nuestro equipaje), y un cocinero que preparaba unas comilonas dignas del mejor restaurante, creemos que es un precio justo.

Sergio con el río Urubamba a sus pies
Sergio con el río Urubamba a sus pies

Es importante saber de antemano que, a la hora de pagar, la agencia Alpaca Expeditions solo acepta dólares americanos. Si pagáis a través de paypal o tarjeta de crédito hay que sumarle una comisión del 5% al precio del viaje (ellos mismos lo explican en toda la documentación que proporcionan). Nosotros intentamos sacar dólares en un banco en la Plaza de Armas de Cuzco, pero existe un límite con relación a la cantidad de dólares que se pueden sacar cada día (no recuerdo exactamente la cantidad), por lo que no conseguimos la totalidad de la cantidad en efectivo, así que el resto tuvimos que pagarlo con tarjeta y con la comisión correspondiente.

Itinerario

El recorrido del Camino Inca, independientemente de la agencia que elijáis, es más o menos el siguiente:

  • Primer día: Salida desde el km. 82– Llactapata – Ayapata (14 km -> 6-7 horas de caminata).
  • Segundo día: Paso de la mujer muerta – Paso Runcuraccay – Chaquiccocha (16 km -> 7-8 horas de caminata). Es el día más duro.
  • Tercer día: Chaquiccocha – Wiñaywayna (10km -> 5 horas de caminata).
  • Cuarto día: llegada a Machu Picchu (se sale del campamento a las 3.30 am).
Mapa de las etapas del Camino Inca
Mapa de las etapas del Camino Inca

Estado de forma física requerido

Otra cuestión a tener en cuenta es que el Camino Inca, sin ser difícil, es exigente, sobre todo por el tema de la altura. Por este motivo, aunque no hace falta ser Kilian Jornet ni mucho menos, sí es recomendable tener un estado de forma física aceptable. Si estáis acostumbrados a hacer rutas o senderismo por la montaña, no deberíais tener ningún problema.

Celebrando haber llegado a la cima del Paso de la Mujer Muerta a 4.200 m.a.
Celebrando haber llegado a la cima del Paso de la Mujer Muerta a 4.200 m.a.

Como comentábamos, la mayor dificultad, no estriba en el estado de forma física, sino en el tema de la altitud. Pensad que la mayoría del tiempo se está por encima de 3.000 metros, llegándose a alcanzar los 4.200 metros de altitud en el paso de la Mujer Muerta. Notaréis que en altura cualquier pequeño esfuerzo cuesta bastante más y uno acaba con la respiración agitada con bastante facilidad.

Ojo con el mal de altura

En algunos casos, se puede llegar a sufrir el temido mal de altura, por ese motivo, se recomienda no hacer el Camino Inca nada más llegar a Perú, sino pasar al menos un par de días en altura antes de comenzarlo para ir aclimatando el cuerpo.

Otra recomendación importante en relación con el mal de altura es no pasarse comiendo. Esta recomendación no siempre es sencilla de cumplir ya que la gastronomía peruana es fantástica y si hacéis el Camino con Alpaca Expeditions veréis que cada comida es un auténtico festín con un montón de platos deliciosos a vuestro alcance. Ahí hay que hacer un auténtico ejercicio de autocontrol, ya que en altura las digestiones son mucho más lentas y pasarse comiendo implica acabar con problemas digestivos que te pueden amargar la experiencia. Esto fue lo que le pasó a un par de personas de nuestro grupo y no pudieron disfrutar de Machu Picchu en las mejores condiciones…

Nuestro cocinero era tan increíble que el último día nos hizo hasta una tarta
Nuestro cocinero era tan increíble que el último día nos hizo hasta una tarta

¿Qué llevar al Camino Inca?

Una de las cosas que más quebraderos de cabeza suelen dar es qué llevarse al Camino Inca. El motivo que hay una limitación de 7 kg de peso máximo en el equipaje permitido. Pero,además, se quedan en 3,5 kg tras restarles el peso del saco, sábana, colchoneta y almohada.

Nuestra recomendación es que no os compliquéis mucho la vida, llevad ropa cómoda de deporte por capas, ya que por la noche bajan mucho las temperaturas mientras que por el día caminando se nota bastante el calor. Para mí fue de gran utilidad un plumas finito que me ponía debajo de una chaqueta técnica y que incluso alguna noche me dejé puesto para dormir. También una mochila cómoda donde meter aquello que necesitéis utilizar desde que salís del campamento donde habéis dormido hasta que llegáis al de la siguiente noche.

Aquí con nuestras mochilas y varias capas menos de con las que empezamos el día.
Aquí con nuestras mochilas y varias capas menos de con las que empezamos el día.

Como podréis imaginar, durante el Camino Inca no hay enchufes ni electricidad, por lo que llevad bien cargadas vuestras cámaras o móviles (allí solo os servirán para hacer fotos o vídeos), así como alguna batería externa.

En cualquier caso, la propia agencia os da una lista de las cosas que no os podéis olvidar 😉

En cuanto al resto del equipaje que llevéis con vosotros en vuestro viaje a Perú, lo podéis dejar en vuestro hotel o bien en el propio local que tiene Alpaca Expeditions en Cuzco el día que hagáis el briefing.

Higiene en el Camino Inca

Si el tema del baño es algo que os preocupa (yo he de reconocer que era algo que me preocupaba bastante), a lo largo del Camino Inca encontraréis en varios puntos baños (sin ducha), aunque es cierto que hay tramos bastante largos en los que solo hay campo…

Pensad que durante el Camino Inca no vais a poder ducharos salvo el tercer día y solo si os atrevéis a ducharos con agua helada. Para lavaros cada día cuando os levantéis y cuando lleguéis al campamento, os dejarán unos barreños pequeños con jabón y agua caliente para poder asearse. En el campamento del tercer día, como ya adelantábamos, sí hay baños y también duchas, pero no agua caliente.

Imagen de nuestro campamento la segunda noche del Camino Inca
Imagen de nuestro campamento la segunda noche del Camino Inca

Si os preocupa lucir melena en Machu Picchu, una recomendación es que os llevéis champú en seco para el Camino Inca. Eso sí, no pretendáis comprarlo en Cuzco porque no lo encontraréis (yo por lo menos no lo conseguí encontrar).

Idioma de las explicaciones

Un tema importante también a tener en cuenta es que con Alpaca Expeditions las explicaciones de los guías durante todo el recorrido son en inglés. Aunque para nosotros en realidad más que un inconveniente nos supuso una ventaja. A la experiencia le sumamos el plus de la inmersión lingüística en inglés: éramos los únicos no anglo-parlantes nativos del grupo de senderistas). Así que aprovechamos la experiencia para practicar el idioma 😀

Sergio brindando a la salida de Machu Picchu con nuestras amigas británicas
Sergio brindando a la salida de Machu Picchu con nuestras amigas británicas

Recomendación final

Una recomendación final: dormir la noche previa a iniciar el Camino Inca en Ollantaytambo en vez de en Cuzco. Hay una gran diferencia entre que te recojan a las 3.00 am en Cuzco o que sea a las 5.30 h si os alojáis en Ollantaytambo. Nosotros aprovechamos el día previo al camino inca a visitar el Valle Sagrado (Pisac y Ollantaytambo) y, en vez de regresar a Cuzco para volver al día siguiente a la misma zona, ya nos quedamos allí.

Vistas de uno de los templos que nos cruzamos el primer día del Camino Inca
Vistas de uno de los templos que nos cruzamos el primer día del Camino Inca

También a la vuelta decidimos quedarnos en Ollantaytambo en vez de regresar a Cuzco y visitar las zonas del Valle Sagrado que nos quedaban pendientes: Moray, Maras y Chinchero y ya desde allí regresar a Cuzco.

¿Alguna duda más?

Aunque creo que hemos recogido las principales cuestiones en relación con el Camino Inca, quedamos a vuestra disposición en la sección de comentarios. Gracias a todos por estar al otro lado 🙂

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